Las chinampas del Valle de México, un modelo de agricultura sostenible

Estas islas flotantes, albergan una rica biodiversidad y generan beneficios económicos y sociales para las comunidades locales.

En el Valle de México, entre canales y trajineras, se encuentra un tesoro agrícola milenario: las chinampas. Estas islas flotantes creadas por manos indígenas hace siglos, son un ejemplo de cómo la agricultura sostenible y la armonía con el medio ambiente pueden ir de la mano.

Las chinampas (del náhuatl «chinamitl», que significa «en la cerca de cañas») son un sistema agrícola que se basa en la construcción de plataformas artificiales sobre lagos poco profundos. Estas plataformas, hechas de troncos, ramas y tierra, se convierten en fértiles huertos donde se cultivan una gran variedad de hortalizas, flores y plantas medicinales.

Fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987 y forman parte de los Sistemas Importantes del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM) de la FAO.

Antecedentes históricos:

El origen de las chinampas se remonta a la época precolombina, cuando los mexicas, también conocidos como aztecas, habitaban el Valle de México. Ante la escasez de tierra cultivable, los mexicas desarrollaron este ingenioso sistema para ampliar su superficie agrícola y alimentar a su creciente población.

A lo largo de los siglos, las chinampas han evolucionado y adaptado a las necesidades y desafíos de cada época. Durante la época colonial, el sistema se mantuvo bajo el control español, quienes lo utilizaron para abastecer a la Ciudad de México de alimentos frescos.

En el siglo XIX, con la independencia de México, las chinampas pasaron a manos de pequeños productores locales, quienes continuaron con la tradición agrícola ancestral. Sin embargo, a partir del siglo XX, las chinampas comenzaron a enfrentar diversos desafíos, como la urbanización, la contaminación del agua y el cambio en los patrones de consumo.

Investigaciones realizadas

Debido a las características que posee y su enigmático origen, las chinampas de Xochimilco han sido un excelente sujeto de estudio, esto con el fin de conocer como se relacionan los diferentes elementos que las componen y cómo esto provoca que sean un sistema de producción eficiente y sostenible.

El Instituto de Biología de la Universidad Autónoma de México (UNAM), en conjunto con los chinamperos, ha implementado durante 10 años un modelo de  chinampa refugio como estrategia para la conservación y reactivación económica del humedal de Xochimilco. El proyecto coordinado por el doctor en Ecología, Luis Zambrano, busca rescatar y retomar las actividades ancestrales en el humedal de Xochimilco. Para esto es necesario reactivar la producción chinampera, la cual destacó por su agricultura sostenible durante dos mil años y contribuyó a la conservación de diversas especies nativas.

El sistema chinampero estaba en una situación crítica y se han podido restaurar condiciones naturales favorables, protegiendo especies endémicas y nativas, por ejemplo el ajolote (Ambystoma mexicanum). Recuperar las chinampas tendría un impacto ecológico importante, ya que su presencia evita el cambio de uso de suelo, sirven como biofiltros que limpian el líquido de los canales y conservan el ecosistema lacustre.

Además, se ha creado un sello de calidad denominado «etiqueta chinampera» con la cual se busca mantener el conocimiento ancestral y darle valor a la producción chinampera a través del acceso a nuevos mercados y así promover una economía sostenible. La etiqueta chinampera se sustenta sobre cuatro ejes:

Económico- financiero: tiene como objetivo reactivar la economía de Xochimilco; Socio-ecosistémico: para mejorar la calidad del agua, desde su limpieza hasta su traslado; Químico microbiológico: mejorar la calidad e higiene en la producción de los alimentos de la chinampa y, Sensorial: busca mantener un alto nivel en las características organolépticas de los productos, como las hortalizas.

También, el Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM, ha estudiado las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) provenientes de las chinampas, donde se concluyó que este tipo de agricultura conservativa no representa un efecto significativo sobre las emisiones a la atmósfera de GEI.

Ejemplo de bioeconomía azul

Las chinampas se destacan como un modelo ejemplar de bioeconomía azul, un concepto que busca el desarrollo económico sostenible a partir de recursos acuáticos, muy similar a la transformación azul que promueve la FAO. En este sentido, las chinampas se destacan por:

  • Aprovechamiento eficiente de los recursos hídricos: Las chinampas se basan en un sistema de riego por inundación que utiliza el agua de los canales de manera eficiente, minimizando el desperdicio y evitando la salinización del suelo.
  • Promoción de la biodiversidad: La diversidad de cultivos y la presencia de canales y zonas aledañas a las chinampas crean un ecosistema rico en biodiversidad, que alberga una gran variedad de flora y fauna.
  • Generación de beneficios económicos para las comunidades locales: Las chinampas son fuente de empleo e ingresos para las familias que viven en las zonas aledañas, quienes cultivan y venden productos agrícolas frescos y de alta calidad. Para el año 2022 se estima que las chinampas emplean alrededor de 12 mil personas las cuales se dedican a actividades relacionadas con la agricultura.

El manejo de la vegetación en las chinampas comprende un total de 51 especies domesticadas, lo que es un ejemplo de un proceso de evolución de la agrodiversidad. También se incluyen 96 especies no domesticadas que son utilizadas como forrajeras (67 %), medicinales (20 %) y alimenticias (13 %). Además de la agrobiodiversidad relacionada con los cultivos, este sistema de producción forma un hábitat adecuado para el desarrollo de diversas especies de fauna, donde se destaca el ajolote el cual es un símbolo mexicano a nivel internacional que se encuentra en peligro de extinción. En resumen, según datos del Gobierno de México, este sistema alberga el 2 % de la biodiversidad mundial y el 11 % de la diversidad del país.

La bioeconomía azul presenta un paradigma nuevo en materia de producción y consumo sostenible mediante el aprovechamiento de los recursos acuáticos. Sin embargo, para garantizar el desarrollo y permanencia de proyectos de bioeconomía azul se deben de cumplir ciertas condiciones.

  • Resiliencia: Es necesario desarrollar estrategias y planes de contingencia los cuales permitan anticipar y mitigar eventos disruptivos relacionados a perturbaciones económicas y riesgos climáticos.
  • Inclusividad: Los proyectos relacionados en esta área deben ser inclusivos, incorporando a las comunidades locales y a las partes interesadas en su desarrollo y gobernanza. Con esto se espera generar oportunidades de empleo y tomar en cuenta los impactos que podría tener la actividad, para garantizar una transición justa y equitativa.
  • Sostenibilidad: Se deben desarrollar proyectos sostenibles, que minimicen los impactos negativos en el medio ambiente y se preserven los ecosistemas tanto marinos como de agua dulce.
  • Circularidad: Para evitar la generación de residuos y fomentar la eficiencia en el uso de materiales, es necesario disponer de un sistema de economía circular. Lo que implica transformar los residuos y subproductos en recursos de valor, reduciendo así la necesidad de extraer más materia prima.
Desafíos y acciones para un futuro sostenible

A pesar de su importancia y legado milenario, las chinampas han enfrentado diversos desafíos en las últimas décadas. Entre ellos destacan:

  • Contaminación del agua: La descarga de aguas residuales y el uso de agroquímicos han contaminado los canales y afectado la calidad del agua, poniendo en riesgo la salud de los ecosistemas y la producción agrícola.
  • Urbanización: El crecimiento de la Ciudad de México ha reducido la superficie disponible para las chinampas, además de generar presión sobre los recursos hídricos y el suelo.
  • Cambio en los patrones de consumo: La preferencia por productos agrícolas a bajo costo y producidos de manera industrial ha impactado la demanda de los productos cultivados en las chinampas.

En respuesta a estas problemáticas, se han implementado diversas acciones para rescatar las chinampas y asegurar su futuro sostenible, entre ellas destacan las siguientes:

  • Programas de educación ambiental: Se busca concientizar a la población sobre la importancia de las chinampas y promover prácticas agrícolas sostenibles que protejan el medio ambiente.
  • Proyectos de infraestructura: Se han realizado inversiones en la construcción de canales, sistemas de riego y tratamiento de aguas residuales para mejorar las condiciones ambientales de las chinampas.
  • Apoyo a los productores: Se han implementado programas de apoyo económico y técnico para los chinamperos, con el objetivo de mejorar su productividad y competitividad.
Fuentes: 
  • https://www.ngenespanol.com/traveler/chinampas-prehispanicas-xochimilco/
  • https://www.fao.org/giahs/giahsaroundtheworld/designated-sites/latin-america-and-the-caribbean/chinampa-system-mexico/detailed-information/es/
  • https://arqueologiamexicana.mx/indice-tematico-mexico-antiguo/las-chinampas-de-mexico-metodos-constructivos
  • https://www.gob.mx/agricultura/es/articulos/la-agricultura-en-chinampas
  • http://www.bib.uia.mx/tesis/pdf/014615/014615_04.pdf
  • https://www.anahuac.mx/generacion-anahuac/el-regreso-de-las-chinampas
  • https://www.youtube.com/watch?v=F0B2ynEV77Q&pp=ygUJY2hpbmFtcGFz
  • https://www.gob.mx/agricultura/articulos/chinampas-una-herencia-prehispanica-de-cultivo
  • https://openknowledge.fao.org/server/api/core/bitstreams/ae439370-d5a7-4552-9968-46ab8dd13b58/content/sofia/2022/transforming-aquatic-based-food.html
  • https://panoramaacuicola.com/2024/06/06/el-surgimiento-de-la-bioeconomia-azul/
  • https://www.inah.gob.mx/boletines/el-sistema-chinampero-de-la-cuenca-de-mexico-en-la-nueva-edicion-de-arqueologia-mexicana?highlight=WyJjaGluYW1wYXMiXQ==
  • https://www.revistascca.unam.mx/rica/index.php/rica/article/view/46142
  • https://unamglobal.unam.mx/global_tv/chinamperos-y-unam-unidos-por-la-supervivencia-del-ajolote/

Ficha elaborada por Alex Siles y Marvin Blanco, julio 2024.

Únete a la conversación